El vicepresidente de Brasil, Hamilton Mourão, restó importancia a los incendios que se desataron en el Amazonas el jueves y dijo que era “surrealista” cómo se los ve en el extranjero como si toda la selva tropical estuviera en llamas.
Mourão dijo que no parecía que las conversaciones de libre comercio UE-Mercosur no estuvieran llegando a un acuerdo concluyente y culpó a los opositores al gobierno y a los agricultores europeos que no pueden competir por las críticas a las políticas ambientales de Brasil que han alimentado la resistencia en Europa para enfrentar el Bloque comercial sudamericano.
Estos dichos se producen cuando el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, apeló el jueves a los negociadores para que concluyan el texto final del acuerdo comercial Unión Europea-Mercosur para que pueda ser firmado este semestre.
Bolsonaro dijo que está trabajando para deshacer las opiniones distorsionadas de las políticas de Brasil sobre la Amazonía y sus pueblos indígenas.
Las medidas ambientales de su gobierno han generado críticas en Europa y llamados a bloquear el acuerdo comercial que ha tardado 20 años en negociarse.
Una quinta parte de las importaciones de soja de la UE desde Brasil pueden provenir de tierras deforestadas ilegalmente, según un estudio publicado el mes pasado que ofrece un inventario detallado de las granjas en la cadena de suministro.
El presidente francés, Emmanuel Macron, dijo que estaba de acuerdo en que Francia no debería firmar ningún acuerdo con países que no sigan el Acuerdo de París sobre cambio climático.
Una vez que esté plenamente ratificado, se permitirán casi 100.000 toneladas adicionales de carne vacuna de los países del Mercosur como Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay en la UE anualmente.
Las organizaciones agrícolas de toda Europa se han opuesto al acuerdo y han ejercido una enorme presión sobre los políticos nacionales sobre el tema.