El presidente de México ha anunciado planes para un referéndum sobre la posibilidad de enjuiciar a sus impopulares predecesores. Sostiene que quiere que “el pueblo” dé luz verde a cualquier procedimiento legal contra los ex presidentes del país.
Andrés Manuel López Obrador entregó un documento al senado el martes, pidiendo un plebiscito sobre el enjuiciamiento de ex presidentes. Este se celebraría a la par de las elecciones intermedias el 6 de junio de 2021.
El documento esboza una letanía de quejas durante las tres décadas anteriores a la llegada al poder de López Obrador en diciembre de 2018, incluyendo privatizaciones plagadas de amiguismo, espiral de violencia y una creciente concentración de la riqueza.
López Obrador ha dicho anteriormente que se opone a que se juzgue a los ex presidentes, diciendo: “No debemos estar anclados en el pasado”. Pero tiene un historial de proponer ideas controvertidas a “la gente”.
El plebiscito presentará desafíos legales, incluyendo la prescripción que ha expirado para la conducta dentro de los términos de todos los ex presidentes vivos, excepto el predecesor inmediato de Amlo, Enrique Peña Nieto. La legislación mexicana también prohíbe la celebración de un referéndum el mismo día de una elección existente.
Los planes para el plebiscito fueron revelados mientras México se enfrenta a las tormentas gemelas de una pandemia que ha cobrado más de 70.000 vidas y una economía en dificultad que recientemente ha visto su peor contracción desde la Gran Depresión.