El presidente ruso Vladimir Putin aprobó la “Estrategia para el desarrollo de la zona ártica de la Federación Rusa y la provisión de seguridad nacional para el período hasta 2035”.
El documento constituye una clave de planificación estratégica relativa a la región del Ártico lanzados por los dirigentes rusos, explica Elizabeth Buchanan, profesora de la Universidad de Deakin.
“Fundamentalmente, hay tres documentos de política que deben ser leídos juntos cuando se considera la estrategia de Rusia para el Ártico”. “Está el documento de ‘Política de Estado’, que esboza los objetivos clave y la agenda de Moscú para el Ártico. Luego tenemos el programa estatal sobre ‘Desarrollo Socioeconómico de la RAZ (Zona Ártica Rusa). El programa de ‘Desarrollo Socioeconómico’ es esencialmente el plan de implementación”, señala Buchanan.
Entre los objetivos figura el desarrollo de la infraestructura de los puertos y de las rutas de navegación en las aguas de la Ruta del Mar del Norte, los mares de Barents, Blanco y Pechora.
También se mencionan varias amenazas y problemas importantes que crean riesgos para el desarrollo de la zona ártica. Entre otros el calentamiento climático intensivo, la disminución del crecimiento natural de la población y la migración, el acceso deficiente a los servicios públicos y el mayor riesgo de enfermedades.
“La mayoría de los desafíos planteados en cuanto al desarrollo del Ártico ruso son, en efecto, de carácter interno. Lo cual no es sorprendente “, dice Buchanan.