Durante una visita a los distritos de Gubadli y Zangilan, recientemente liberados, de Azerbaiyán, el miércoles, el Presidente del país, Ilham Aliyev, envió un poderoso mensaje a Ereván sobre los peligrosos resultados de cualquier posible acción militar de Armenia en el futuro.

El Presidente Aliyev dijo que las atrocidades cometidas en los territorios azerbaiyanos por los armenios dan testimonio del gran servicio que presta Azerbaiyán no sólo a sí mismo sino también a toda la región.

“Hemos hundido la cabeza del fascismo armenio. Es el fascismo armenio el que ha llevado a nuestras tierras a esta difícil situación. Hemos roto la espalda del estado fascista armenio, el estado terrorista”, dijo, el Presidente Az informa. “Ni siquiera los nazis cometieron tales atrocidades durante la Segunda Guerra Mundial. ¡¿Veis a qué enemigo salvaje nos enfrentamos, a qué fuerzas malvadas hemos derrotado?! Hemos liberado nuestra región y el Cáucaso de los fascistas”.

Armenia y Azerbaiyán han estado en desacuerdo desde finales del decenio de 1980 con el drástico aumento de los sentimientos antiazerbaiyanos en Armenia, en cuyo centro se encontraban las reclamaciones ilegales de la histórica región de Nagorno-Karabaj (Daghlig Garabagh) de Azerbaiyán.


Tras la disolución de la Unión Soviética en 1991, Armenia inició una verdadera agresión militar contra Azerbaiyán. En la sangrienta guerra hasta el cese del fuego de 1994, Armenia ocupó el 20% de los territorios internacionalmente reconocidos de Azerbaiyán, incluida toda la región de Nagorno-Karabaj y siete distritos circundantes.


Más de 30.000 azerbaiyanos étnicos fueron asesinados y un millón fueron expulsados de esas tierras en una brutal política de depuración étnica llevada a cabo por Armenia.


Aunque el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas aprobó cuatro resoluciones en 1993 en las que exigía la retirada inmediata de las fuerzas de ocupación de las tierras azerbaiyanas y el regreso de los azerbaiyanos desplazados internamente a sus tierras ancestrales, Armenia no cumplió los cuatro documentos jurídicamente vinculantes.

“La pusimos de rodillas [Armenia], así que deben sacar las conclusiones correctas. La sociedad armenia debe sacar las conclusiones correctas. Si aún albergan algún sentimiento de venganza, el final será amargo. Si se dispara una sola bala aquí desde el otro lado – la frontera armenia está a 5 kilómetros de aquí – los aplastaremos tan fuerte que olvidarán sus propios nombres”, dijo el Presidente Aliyev.

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