Australia está planeando construir el mayor proyecto de infraestructura de la Antártida: un nuevo aeropuerto y una nueva pista de aterrizaje que aumentaría la huella humana en la mayor zona silvestre del mundo en un 40% estimado.
Es probable que el mega-esquema implique la voladura de colonias de petreles, la perturbación de las colonias de pingüinos y el encajonamiento de un tramo de las zonas silvestres en más de 115.000 toneladas de hormigón.
El gobierno de Canberra dice que el proyecto en lasestación de investigación Davises necesario para proporcionar a los científicos y a los equipos de emergencia acceso durante todo el año a la estación de investigación Davis, la base más meridional de Australia en la Antártida. También se tienen en cuenta las preocupaciones estratégicas; Australia está dispuesta a contrarrestar la creciente presencia de China en el continente austral congelado.
Los científicos medioambientales dicen que el plan multimillonario es un desperdicio de dinero, y podría llevar a una destructiva carrera de construcción entre rivales territoriales.
“No tiene precedentes en la Antártida en cuanto a la escala de la inversión y el impacto en el medio ambiente. Aunque se está haciendo en nombre de la ciencia, muy pocos científicos están entusiasmados. Se trata más bien de agitar banderas. Se trata de reafirmar la presencia de Australia y nuestra reivindicación”, dijo Shaun Brooks, científico ambientalista del Instituto de Estudios Marinos y Antárticos de la Universidad de Tasmania.
Él estima que el proyecto añadiría un 40% a la infraestructura existente en el continente, lo que sería perjudicial e innecesario.
“No puedo evitar pensar que esto se convertirá en un elefante blanco. ¿Cómo se puede justificar una pista de aterrizaje multimillonaria para una base con sólo 19 personas durante el invierno y que se ha mantenido sin problemas desde 1957?” Brooks dijo.
La nueva pista de aterrizaje propuesta por Australia tendría 2,7 km de largo y 40 metros de ancho, y -a diferencia de las pistas de hielo y grava existentes en la Antártida- sería una estructura permanente construida sobre el paisaje con cemento y 11.500 bloques de hormigón, cada uno de los cuales pesa más de 10 toneladas.
Pingüino Adelia cerca de la estación de investigación Davis, en las colinas de Vestfold, donde se planea el nuevo aeropuerto y la pista de aterrizaje. Fotografía: Tui De Roy/NPL/Alamy