El Reino Unido dijo el jueves que la crisis de las gasolineras causada por una aguda escasez de camioneros estaba de nuevo bajo control, pero muchos surtidores seguían cerrados en Londres, dejando a los automovilistas buscando o haciendo cola durante horas para llenar sus tanques.
En una semana caótica en la que se produjeron peleas en las gasolineras y la gente llenó botellas de agua viejas con gasolina, los ministros británicos han dicho repetidamente que la crisis se está aliviando, aunque el miércoles ordenaron a los soldados que empezaran a conducir camiones cisterna de combustible.
“Esa crisis es ahora absolutamente algo que está de nuevo bajo control”, dijo el secretario jefe del Tesoro, Simon Clarke.
Reporteros de Reuters visitaron el jueves siete gasolineras en Londres y sus alrededores. Dos estaban abiertas. Una fila de decenas de conductores salía de una de las estaciones abiertas y el personal intentaba dirigir la cola.
La Asociación de Minoristas de Gasolina (PRA), que representa a los minoristas independientes que representan alrededor de dos tercios de todas las 8.380 gasolineras del Reino Unido, dijo el miércoles que el 27% de los miembros informaron de que se habían quedado sin combustible y que esperaba que la situación mejorara aún más en las próximas 24 horas.
La crisis de las gasolineras ha provocado escarnio en algunas otras capitales europeas, con políticos de alto nivel sugiriendo que la escasez de camiones era una clara consecuencia de la decisión del referéndum de 2016 de abandonar la Unión Europea.
Los ministros británicos han negado repetidamente que el Brexit haya desempeñado un papel, aunque decenas de miles de camioneros de la UE se marcharon durante la vorágine del Brexit, y han citado los cierres de COVID que impidieron decenas de miles de pruebas de camioneros.
Preguntado sobre si Gran Bretaña estaría en mejor posición si no hubiera abandonado el mercado único, Clarke dijo: “Realmente no lo acepto”.
“La idea de que esto es sobre el Brexit es para tratar de llevarnos de nuevo a lo que es realmente, me temo, una conversación bastante negativa sobre las oportunidades perdidas”, dijo.
“Si miramos la situación en Alemania, si miramos la situación en Polonia, si miramos la situación en Francia, también comparten estos problemas”, dijo.
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