Luego de meses enteros de protestas, los agricultores de la India han puesto fin a sus manifestaciones luego de que el gobierno de Modi haya escuchado y aceptado la mayoría de sus demandas.
Las protestas de granjeros y agricultores fueron un punto de inflexión para el país y para la administración de Modi, que pese a haber derogado tres leyes agrícolas contenciosas no pudo evitar que los trabajadores continuaran manifestándose.
Esta noticia surge luego de que el gobierno accediera a formar un panel para tratar y considerar distintas cuestiones, como los precios garantizados de los cultivos en el país, los casos presentados contra agricultores en diversas regiones, entre otros.
Se estima que frente a estas noticias los agricultores comiencen a desocupar los sitios de protesta a partir de este sábado 11 de diciembre, ya que los granjeros se establecieron en tiendas de campaña en diversos puntos del país.
Estas protestas fueron históricas, siendo una de las más largas de la historia de la India. Además, hubo que desplegar casi 50.000 efectivos de fuerzas de seguridad, junto a barricadas de cemento, alambre de púas, cañones de agua, entre otras medidas.
Según los representantes de los agricultores, la “agitación actual” está suspendida y celebran que “se ha ganado la batalla”, pero afirmaron que “continuará la guerra” ya que anunciaron que en enero volverán a revisar si sus demandas se han cumplido.
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