El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskiy, afirmó el martes que Rusia debe poner fin a los bombardeos sobre las ciudades ucranianas antes de que puedan iniciarse conversaciones significativas sobre un alto el fuego, ya que la primera ronda de negociaciones, celebrada esta semana, ha dado escasos resultados.
En una entrevista concedida en un recinto gubernamental fuertemente custodiado, Zelenskiy instó a los miembros de la OTAN a imponer una zona de exclusión aérea para detener a las fuerzas aéreas rusas, afirmando que se trata de una medida preventiva y que no pretende arrastrar a la alianza a una guerra con Rusia.
Zelenskiy, que ha rechazado las ofertas de abandonar la capital ucraniana ante el avance de las fuerzas rusas, dijo también que Ucrania exigiría garantías de seguridad jurídicamente vinculantes si la OTAN cerraba la puerta a las perspectivas de adhesión de Ucrania.
El miércoles está prevista otra ronda de conversaciones entre Rusia y Ucrania, según informó la agencia de noticias rusa TASS, citando una fuente de la parte rusa.
Según Tass, otro medio de comunicación ucraniano, Glavkom, reveló los términos propuestos por los dos países durante las conversaciones iniciales. Rusia habría exigido que el Parlamento ucraniano se comprometa a mantener al país fuera de la Unión Europea.
Rusia también exigió que Ucrania reconociera a las dos regiones separatistas, las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk. Rusia también dijo a Ucrania que retirara su demanda de que Crimea fuera devuelta a Ucrania.
Ucrania, por su parte, exigió un alto el fuego y la retirada de las tropas rusas del territorio.
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