En vísperas de la IX Cumbre de las Américas próximas a organizarse en los Estados Unidos, el presidente Alberto Fernández se reunión el último jueves con Cristopher Dodd, asesor especial de la administración de Joe Biden: la tensión existente se da en el marco de la posición de invitación “sin exclusiones” a ningún país, contra la decisión de excluir a Cuba, Venezuela y Nicaragua de dicho evento que sostiene el gobierno del norte.
“Argentina va trabajar para el éxito de la Cumbre, con todos incluidos” deslizó el presidente Fernández al enviado estadounidense, sin que la reunión decantará en si Argentina eventualmente participará o no de la cumbre internacional.
Del encuentro entre Fernández y Dodd participaron el jefe de gabinete, Juan Manzur, y el secretario de Asuntos Estratégicos de Presidencia, Gustavo Béliz, habitué en los encuentros de miembros del gabinete local con referentes de los Estados Unidos.
Argentina ha fortalecido su posición de resistencia ante el sostén de Estados Unidos de mantener la exclusión de Cuba, Venezuela y Nicaragua. En este marco, Argentina puso en duda su participación en la cumbre, posición compartida, entre otros países, por México.
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Beliz es muy cercano a los estadounidenses.