En el marco de la Décima Conferencia de Revisión del Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares, el canciller Santiago Cafiero había destacado en su exposición cuestiones como la posición de paz que Argentina defiende en América Latina, la necesidad del desarme de armas nucleares y el abandono de programas no pacíficos, entre otros. Sin embargo, también había rechazado la presencia militar británica en el Atlántico Sur, algo que llamó la atención de su contraparte del Reino Unido.
En esta ocasión, los representantes del Reino Unido y de Argentina hicieron uso de la palabra en ejercicio del derecho de réplica. El británico dio respuesta a los comentarios de su homólogo argentino sobre la guerra de Malvinas y afirmó que el tema “ha sido de dominio público durante casi 20 años”. Puntualizó en que “no se llevaron armas nucleares a las aguas de Malvinas durante el conflicto” y que “todas las cargas de profundidad se devolvieron al Reino Unido”. Concluyó su posición destacando que el Reino Unido ratificó el Tratado para la Proscripción de las Armas Nucleares en la América Latina y el Caribe (Tratado de Tlatelolco) en 1969 y que “no tiene dudas sobre su soberanía sobre las Islas”.
Por el contrario, la representante argentina rechazó lo dicho por el Reino Unido y reiteró lo expuesto por el canciller Santiago Cafiero, afirmando que “las Islas Malvinas, Las islas Georgias del Sur y Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes forman parte del territorio argentino” y que “están ocupados ilegítimamente por el Reino Unido desde 1833”. No solo destacó que “son objeto de una disputa de soberanía reconocida por las Naciones Unidas que caracteriza la situación de Malvinas como una situación colonial especial y particular”, sino que también solicitó una actualización sobre las 31 cargas nucleares de profundidad enviadas por el Reino Unido a Malvinas, en particular sobre el número de kilotones y los principales impactos en la región.
Te puede interesar: Malvinas: Argentina detectó 5 vuelos desde Chile que habrían violado el espacio aéreo nacional