El pasado sábado, el Ministerio de Defensa de Rusia afirmó que se están retirando las fuerzas del país de dos áreas en la región ucraniana de Járkov debido a los avances contraofensivos de Kiev en la última semana. Sin embargo, Moscú lo describe como una “reagrupación” de las tropas en el este de Ucrania en Balaklia e Izium hacia la región de Donetsk, según el portavoz del Ministerio, Igor Konashenkov.
Konashenkov ha declarado que este movimiento de las fuerzas nace “para lograr los objetivos declarados de la operación militar especial para liberar Donbás”, mientras que el servicio de inteligencia nacional de Ucrania (SBU) publicó el sábado unas fotos en Telegram donde aparentemente se veían unidades ucranianas en la ciudad de Kupyansk, hasta ahora ocupada por tropas rusas.
Por su parte, el servicio de inteligencia británico realizó una reciente evaluación en la cual confirma que las tropas ucranianas “han avanzado hasta 50 kilómetros en territorio anteriormente controlado por Rusia” en el sur de la región de Járkov, ya que antes las fuerzas rusas se encontraban bajo presión tanto en el flanco norte como en el sur del conflicto.
Mientras la guerra se prolonga, Zelenski declaró que las tropas ucranianas habían reconquistado más de 30 ciudades y pueblos en Járkov, continuando recibiendo miles de millones de dólares en ayuda militar de los países occidentales.
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