En el marco de su visita a Medio Oriente la semana pasada, el secretario de Estado norteamericano, Tony Blinken, pidió al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y al presidente palestino, Mahmoud Abbas, acordaron una “pausa” temporal en ciertas acciones belicas, incluida la actividad de asentamientos israelíes en Cisjordania ocupada y los movimientos palestinos. Desde Estados Unidos afirman que la administración de Biden espera poder llegar a acuerdos en algún tipo de “pausa”, pero advirtió que la situación actual es tan frágil que será muy difícil de lograr y sostener.
En este sentido, la posibilidad de acordar un cese a la violencia en dichos territorios, responde a la búsqueda por parte del gobierno de Estados Unidos de reducir la escalada de la situación en Cisjordania y evitar que se deteriore y termine convertida en una tercera intifada. La propuesta presentada a los gobiernos de Israel y Palestina, incluye un paquete de pasos que Estados Unidos espera que ambos puedan concretar y otros que se abstendrán de realizar para reducir las tensiones.
Funcionarios estadounidenses explicaron que el detrás de escena apunta a que Estados Unidos quiere que la “pausa” dure varios meses e incluye un compromiso israelí de posponer la actividad militar en asentamientos, las demoliciones de hogares palestinos y los desalojos de palestinos en Cisjordania y Jerusalén Este.
Al mismo tiempo, el gobierno de Estados Unidos espera que la Autoridad Palestina reanude la coordinación de seguridad con Israel – suspendida desde el mes pasado – al tiempo que posponga la adopción de medidas adicionales contra Israel en las instituciones de la ONU y otros organismos internacionales.
Frente a ello, funcionarios israelíes le respondieron a la administración de Biden que están dispuestos “a tomar medidas para reducir significativamente las actividades a las que se opone Estados Unidos”, sin embargo enfatizaron que no podrán detenerlas por completo. Por su parte, funcionarios estadounidenses informaron que fuentes cercanas al gobierno de Palestina afirmaron que están dispuestos a entrar en tal “pausa” solo si la misma es mutua,
En línea a esto, Barbara Leaf, subsecretaria de Estado de Estados Unidos para asuntos del Cercano Oriente, se reunió durante la semana pasado por separado con el asesor de seguridad nacional de Netanyahu, Tzachi Hanegbi, y con el asesor principal de Abbas, Hussein al-Sheikh, para dar seguimiento a la solicitud de Blinken.
Fuente: Axios.
Te puede interesar: Se recrudece el conflicto entre Israel y Palestina