Recientemente, el Grupo de Trabajo de la ONU sobre Empresas y Derechos Humanos arribó a Argentina en el marco de una visita oficial. Durante la misma, se reunieron con representantes del gobierno, la sociedad civil, sindicatos, pueblos indígenas, empresas privadas y estatales, con el fin de discutir – y abordar – las oportunidades y los desafíos que enfrenta la implementación de los Principios Rectores sobre las Empresas y los Derechos Humanos de la ONU (PRNU), al tiempo que realizaron una evaluación sobre la situación de dichos principios en el país.
El Grupo de Trabajo visitó las provincias de Neuquén, Catamarca y Chaco, y sostuvo encuentros con diferentes actores, incluso de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y de las provincias de Buenos Aires, Córdoba, Corrientes, Entre Ríos, Jujuy, La Rioja, Misiones , Río Negro, Salta, San Juan y Tucumán. También recibieron informes escritos de otras provincias. Y además, lograron presenciar de primera mano – entre otras cuestiones – los impactos en los derechos a la salud, un medio ambiente limpio, saludable y sostenible, agua y saneamiento, participación, acceso a la información, subsistencia y desarrollo del país.
Resultados de la evaluación
Luego de realizar una evaluación, los expertos de Naciones Unidas lograron advertir una serie de fallas que exponen que Argentina no está cumpliendo con sus obligaciones bajo los tratados internacionales de derechos humanos que ha ratificado. En línea a esto, Puchamon Yeophantong, presidente del Grupo de Trabajo afirmó: “Argentina no debe olvidar que las personas, las comunidades y el medio ambiente deben ser lo primero. Fortalecer la economía causando daños irreparables a la salud y la biodiversidad de las personas no es una forma viable de avanzar”.
A pesar de reconocer los avances políticos por parte del Estado argentino, particularmente destacando la incorporación de una perspectiva de género y la inclusión social, el Grupo de Trabajo de la ONU sostuvo que la protección de los derechos humanos de algunos grupos dentro del país continúa estando en segundo plano. Asimismo advirtieron que estas desigualdades se han acentuado debido a la sobreexplotación de los recursos naturales, con graves impactos en los derechos humanos que deben ser atendidos.
Abordar problemas sistémicos y prevenir impactos
Pichamon Yeophantong sostuvo: “Argentina necesita abordar urgentemente estos problemas sistémicos”, entiendo que el país “no debe olvidar que las personas, las comunidades y el medio ambiente deben ser lo primero. Fortalecer la economía causando daños irreparables a la salud y la biodiversidad de las personas no es una forma viable de avanzar”.
Por su parte, Fernanda Hopenhaym afirmó: “Es alarmante la invisibilidad que sufren los Pueblos y Comunidades Indígenas, históricamente excluidos y discriminados y que sistemáticamente han tenido mayores índices de pobreza y menor acceso a la salud y la educación”. Y agrego: “Grandes barreras para acceder a la justicia y la debilidad de ciertas instituciones del Estado, hace que las personas y comunidades afectadas se sientan desesperanzadas”.
Por lo que se realizó un llamado a las autoridades y empresas argentinas a fortalecer los esfuerzos para prevenir estos impactos negativos y garantizar el acceso a la reparación. “Cuando corresponda, las reparaciones deben hacerse considerando los impactos socioeconómicos y ecológicos acumulados que han venido sufriendo estas comunidades” sostienen desde Naciones Unidas.
Fuente: Oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos de Naciones Unidas.
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