Esta semana, Estados Unidos tratará de bloquear los acuerdos de cooperación entre Argentina y China en materia nuclear. En concreto, la construcción de la cuarta central atómica en el país latinoamericano con tecnología de la potencia asiática. Por ello, el gobierno estadounidense aceleró el envío de funcionarios hacia Buenos Aires para advertir sobre los riesgos y la “inconveniencia” de asociarse con China.
El presidente de la Comisión Reguladora Nuclear de EEUU, Christopher Hanson, llegó al país este martes con el mismo objetivo de las visitas realizadas en marzo por el secretario adjunto de Energía, David Turk, y, en enero, por el embajador Marc Stanley, relativas a las instalaciones del Complejo Nuclear de Atucha. En febrero, la estatal Nucleoeléctrica Argentina firmó un acuerdo con la Corporación Nuclear Nacional China para la construcción de la central nuclear Atucha III, destinada a complementar la generación eléctrica de los complejos Atucha I y II. El acuerdo no solo prevé que el país asiático financie el proyecto —cuyo costo total superaría los 8.000 millones de dólares— sino que se utilice la tecnología Hualong One, es decir, un tipo de reactor nuclear diseñado en China.
En su viaje, Hanson buscará comunicar una vez más los riesgos y la inconveniencia de asociarse con China como también el “interés de Washington en lograr la cooperación de Argentina”. Sin embargo, la verdadera misión del funcionario norteamericano es impedir un despliegue de capitales chinos en América Latina, especialmente en sectores estratégicos.
Despliegue de funcionarios
Christopher Hanson no será el último enviado estadounidense en pisar suelo argentino. El Departamento de Estado, también programó una visita de su vicesecretaria, Wendy Sherman, a la capital argentina, en donde se entrevistará con el canciller argentino, Santiago Cafiero, y el ministro de Economía, Sergio Massa. También incluyó en su agenda un encuentro con la secretaría de Energía, Flavia Gabriela Royón. Por otro lado, el 17 de abril, viajará a Argentina la jefa del Comando Sur de las Fuerzas Armadas, Laura Richardson, quien tiene previsto reunirse con el ministro de Defensa argentino, Jorge Taiana.
Sergio Cesarín, un analista internacional especializado en Asia, subrayó en un diálogo con el medio de comunicación Sputnik, que las visitas de altos funcionarios estadounidenses “son consecuentes con la posición de EE.UU. con respecto al avance de China en América Latina”.
En el caso de Argentina, las presiones desde Estados Unidos encuentran un respaldo en “la dependencia financiera” que Buenos Aires tiene del Departamento del Tesoro estadounidense y organismos multilaterales de crédito como el Fondo Monetario Internacional (FMI), con quien el Gobierno argentino mantiene un acuerdo para el pago del préstamo de US$44 mil millones otorgado por el organismo al Gobierno encabezado en ese entonces por Mauricio Macri (2015-2019).
Cesarín señaló que Argentina requiere “la aquiescencia de Biden y los organismos internacionales para sobrevivir financieramente”, lo que pone al país en un “juego cruzado de presiones”.
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Ya sabemos sus intereses, no quieren la planta de energía que quieren hacer los chinos, pero el tío Sam no pone los millones para hacer una planta, o sea nos conviene el que pone más plata
Para EUA la edad de bronce es mucho para nosotros. Nos quieren mandar a la edad de piedra. Tenemos una oportunidad con los chinos y acá la van a desperdiciar. Hasta Uruguay es más firme que nosotros. Una vergüenza la clase política que tenemos.