En los últimos meses se ha registrado un crecimiento lento pero constante del uso del yuan chino en el comercio mundial, y cómo el mismo comienza a desafiar la tradicional supremacía del dólar estadounidense como moneda preferida en las transacciones internacionales. Y aunque el uso del yuan no es del todo común, sí es cierto que China ha estado promoviendo activamente el uso del yuan como moneda de liquidación en operaciones transfronterizas, como una forma de internacionalizar su moneda.
Estos cambios en el sistema financiero internacional comienzan a hacerse palpables cuando diversos países empiezan a adaptar el yuan con el objetivo de facilitar sus operaciones comerciales. Y para los analistas, estos movimientos iniciales para utilizar el yuan en el comercio internacional podrían sentar las bases para la creación de un sistema de pago que opere junto al dólar estadounidense. Tal es el caso de Argentina, por ejemplo, que según la CBS el mes pasado anunció que se utilizaría el yuan chino para pagar sus importaciones provenientes de China, debido principalmente a la escasez de dólares en el país. Al mismo tiempo, Brasil anunció que permitiría a sus empresas comerciar con yuanes también.
Es encesario destacar que el yuan aún no consigue tener la estabilidad que tiene el dólar en el mercado mundial, pero es fundamental observar que la moneda de China se utilizó en el 48,4% de todas las transacciones transfronterizas del pasado mes de marzo, donde la participación del dólar cayó al 46,7%. Asimismo, los datos de SWIFT mostraron que la participación del yuan en las transacciones de divisas globales para la financiación del comercio aumentó al 4,5 % en marzo, mientras que el dólar representó el 83,71 %.
Es cierto que Beijing mantiene un control estricto sobre su moneda, lo cual complica la adopción global del yuan en múltiples casos. Sin embargo, estos “pequeños” eventos que se están desarrollando en distintos países muestran el ritmo constante de China por incrementar su presencia en la arquitectura comercial del mundo e ir ganando impulso, para luego, tal vez, configurarla a su medida.
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Esta es una de las principales razones por la que EEUU ve en China una amenaza a su supremacía mundial. Es la razón por la que, junto a Rusia, son los países a contener y eventualmente eliminar del concierto mundial. Son los enemigos mayores de las intenciones hegemónicas de EEUU.