Durante la madrugada, militantes de la Franja de Gaza lanzaron cohetes luego de que las fuerzas israelíes se retiraran del campamento de refugiados en la ciudad palestina de Yenín el pasado martes, abandonando una de las mayores operaciones militares en Cisjordania en 20 años. En respuesta, el Ejército de Israel golpeó una instalación subterránea de fabricación de armas, mientras que todavía no está claro si habrá más escalada.
Horas antes, reporteros del medio Reuters observaron convoyes de vehículos militares israelíes abandonando Jenin después del anochecer, lo que parecía señalar el fin de una operación israelí que había comenzado temprano el lunes. Operación que terminó con la muerte de al menos doce palestinos, entre ellos combatientes, y un soldado israelí.
En este sentido, dicha operación tenía como objetivo destruir infraestructuras y armas militares en el campamento de refugiados de Jenin, y para ello se lanzó el ataque de un dron el lunes, y se desplegaron más de 1000 tropas. Una vez finalizada la retirada, los residentes que habían evacuado el campamento durante los enfrentamientos comenzaron a regresar.
El campamento de refugiados, donde viven unas 14.000 personas en menos de medio kilómetro cuadrado, ha sido uno de los principales puntos focales de la ola de violencia que ha sacudido Cisjordania durante más de un año, generando creciente preocupación en la comunidad internacional.
Por otra parte, tan solo unas horas después de que las fuerzas israelíes comenzaran a retirarse, un grupo de militantes palestinos en la Franja de Gaza dispararon cinco cohetes hacia Israel, según informó el ejército. Sin embargo, los cohetes fueron interceptados y no hubo informes inmediatos de víctimas.
Te puede interesar:Crítica de Israel a Argentina por su pronunciamiento sobre la Franja de Gaza