Se divulgaron los resultados de una investigación llevada a cabo por la Fundación Latinoamericana de Sostenibilidad Pesquera (FULASP).

Argentina posee ricos y valiosos recursos pesqueros que pueden ser aprovechados de forma eficiente, justa y sostenible para alimentar al mundo.

Un estudio de la Fundación Latinoamericana de Sostenibilidad Pesquera (FULASP) sugiere que Argentina podría convertirse en una potencia industrial en la pesca para el año 2030. Para lograr este objetivo, seis organismos y empresas públicas relacionadas con ciencia y tecnología ya están llevando a cabo iniciativas para mejorar el control del uso de los recursos naturales y garantizar la sostenibilidad.

Estas iniciativas han sido valoradas teniendo en cuenta las condiciones naturales del país, un cambio en las políticas públicas y nuevos proyectos productivos, lo que proyecta a Argentina como una nación emergente con grandes posibilidades de satisfacer la creciente demanda mundial.

El informe destaca que Argentina lidera la lista de países con recursos pesqueros más valiosos para abordar los desafíos de alimentar al mundo de manera efectiva, equitativa y sostenible. Actualmente, el país ocupa el quinto lugar como exportador mundial de camarones y langostinos congelados.

Las razones que han contribuido a la buena posición de Argentina en este aspecto incluyen su potencial exportador, tanto en proyectos públicos como privados para diversificar las especies y promover la acuicultura, así como la obtención de certificaciones ambientales para acceder a nuevos mercados. Además, se ha reconocido oficialmente a la industria naval como actividad estratégica y se han hecho esfuerzos para combatir la pesca ilegal.

La pesca de arrastre es la práctica pesquera más utilizada por la Industria Argentina.

El estudio se basó en las necesidades planteadas por el Comité de Pesca de la FAO y evaluó posibles acciones para aprovechar de manera óptima los recursos y expandir el potencial industrial, con el objetivo de contribuir a la lucha contra la pobreza, el hambre y la malnutrición.

Entre los organismos públicos involucrados, el Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (INIDEP) desempeña un papel fundamental, brindando asesoramiento con informes científicos y realizando estudios continuos sobre los recursos marinos y el ecosistema marino. Utilizan datos satelitales y proporcionan información relevante a otras entidades gubernamentales.

Asimismo, se están llevando a cabo proyectos tecnológicos en colaboración con otros organismos científicos para combatir la pesca ilegal en el Mar Argentino, desarrollar bioproductos y monitorear la actividad pesquera.

Recientemente, el Banco Interamericano de Desarrollo aprobó fondos para la investigación en pesca y sanidad agropecuaria, destinando un préstamo de 125 millones de dólares para el SENASA y el INIDEP. La Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) también está trabajando en un sistema de soporte para la actividad pesquera utilizando información satelital.

Además, el Servicio Geológico Minero (SEGEMAR) ha firmado un acuerdo para realizar investigaciones sobre el límite exterior de la plataforma continental, tras la sanción de la Ley de Demarcación correspondiente.

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Redacción
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