Dos marines de la Armada de los Estados Unidos fueron arrestados en el sur de California y acusados de proporcionar secretos militares e información sensible a oficiales de inteligencia chinos, según se desprende de un par de acusaciones federales divulgadas el jueves.
Jinchao Wei, conocido como Patrick Wei y de 22 años, fue acusado de espionaje para China bajo la Ley de Espionaje. Wei presta servicio a bordo del Essex, un buque de asalto anfibio atracado en la Base Naval de San Diego, sede de la Flota del Pacífico. Como especialista mecánico, según los investigadores, contaba con autorización para acceder a información de seguridad nacional sensible.
El segundo, el oficial de marinería Wenheng Zhao, también conocido como Thomas y de 26 años, fue acusado de recibir sobornos a cambio de proporcionar información militar sensible de EE. UU. a un oficial de inteligencia chino que se hacía pasar por un investigador económico. Zhao trabajaba en la Base Naval del Condado de Ventura en Port Hueneme, hogar de varios escuadrones de aviones y batallones de construcción naval del servicio en el Pacífico.
Las acusaciones parecen reflejar el profundo interés del gobierno chino en la Flota del Pacífico de la Armada y otros aspectos de las operaciones militares estadounidenses en esa región, como parte de un esfuerzo más amplio de China para robar secretos corporativos y de seguridad nacional estadounidenses. La magnitud del espionaje chino, incluidas las brechas cibernéticas, ha llevado a los principales funcionarios de seguridad nacional a dar la alarma.
En un testimonio ante el Congreso este año, el director del FBI, Christopher A. Wray, advirtió: “No hay ningún país que represente una amenaza más significativa para nuestra innovación, nuestras ideas, nuestra seguridad económica y nuestra seguridad nacional que el gobierno chino”.
¿Cómo espió China a los Estados Unidos?
Según los fiscales, Wei comenzó a trabajar para China a principios de 2022. Al prestar servicio como especialista mecánico en la Armada, es un ingeniero entrenado para operar y mantener una variedad de equipos, desde pequeñas bombas hasta refrigeradores y maquinaria grande para propulsar un barco por el océano.
Proporcionó a su superior información sobre las capacidades defensivas y armamentísticas de los buques de guerra de Estados Unidos, así como sus vulnerabilidades, comunicándose a través de plataformas encriptadas. En una ocasión en junio del año pasado, el oficial de inteligencia chino le pidió a Wei información sobre “el número y entrenamiento de los infantes de marina de Estados Unidos durante un próximo ejercicio internacional de guerra marítima”.
En otra instancia, Wei recibió $5,000 por 30 manuales técnicos y mecánicos de barcos, según los documentos presentados en la corte. Algunos de los datos que Wei proporcionó a los chinos fueron considerados “tecnología crítica” por la Armada de Estados Unidos.
En un comunicado de prensa, el Departamento de Justicia dijo que los buques de guerra como el Essex son “la piedra angular de la preparación anfibia y las capacidades de ataque expedicionario de la Armada de Estados Unidos”.
En la segunda acusación, Zhao, originario de Monterey Park, trabajó bajo las órdenes de un oficial de inteligencia chino no identificado desde agosto de 2021 hasta al menos mayo de este año.
Entre los detalles sensibles que envió al oficial se encontraban diagramas eléctricos y planos de un sistema de radar estacionado en una base militar de Estados Unidos en Okinawa, Japón, así como planes operativos para un ejercicio militar de gran escala de Estados Unidos en la región del Indo-Pacífico. Según los fiscales, esos planes detallaban la ubicación específica y el momento de los movimientos de la fuerza naval, los desembarques anfibios, las operaciones marítimas y el apoyo logístico.
Según los fiscales, ambos hombres ganaron miles de dólares trabajando secretamente para China.
Te puede interesar: ¿Se confirma que China tiene una base de espías en Cuba desde el 2019?