La disputa territorial entre Guyana y Venezuela por el Esequibo se intensifica tras la propuesta de un referendo consultivo planteado por el Gobierno de Nicolás Maduro. Con casi 160,000 kilómetros cuadrados en disputa, la región fue objeto de contención y rivalidad durante décadas.
En este sentido, el referendo se presenta como un intento de Venezuela para consolidar su reclamo sobre el territorio en cuestión y presionar por una anexión oficial. Guyana, por su parte, mostró preocupación y rechazo hacia esta iniciativa, destacando su defensa de la integridad territorial.
La propuesta surgió en septiembre como respuesta a una serie de licitaciones de bloques petroleros en áreas marítimas que, según argumenta el Gobierno venezolano, están dentro de la zona en disputa. La votación plantea cinco preguntas que abordan acuerdos sobre la disputa, la creación de un estado para la anexión del Esequibo y el rechazo a la jurisdicción de la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
Disputa histórica
La base de la disputa se remonta al Laudo Arbitral de París de 1899, un dictamen que otorgó el Esequibo a Guyana y Venezuela cuestionó debido a presuntas irregularidades y presiones. A pesar de los esfuerzos internacionales para resolver este conflicto, que incluyó la participación de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), las tensiones continúan creciendo.
Especialmente tras los descubrimientos de reservas de petróleo y gas en la región, que convirtieron al territorio en estratégico y rico en recursos para los intereses de ambos países.
Por su parte, la comunidad internacional expresó su preocupación por el referendo propuesto, temiendo una posible escalada de violencia. Siguiendo esta línea, CARICOM rechazó la validez de la consulta venezolana y enfatizó en la importancia de mantener la región como una zona de paz.
Te puede interesar: Estados Unidos levanta temporalmente las sanciones sobre el petróleo, el oro y el gas de Venezuela