Las rápidas relaciones en desarrollo entre Rusia e Irán comienzan a afectar las acciones rusas en la frontera entre Siria e Israel, que ahora es una de las áreas más tensas de la región, como resultado de la guerra entre Israel y los representantes iraníes en Líbano y Gaza.
Las fuerzas israelíes detectaron la semana pasada un helicóptero ruso sobrevolando cerca de la frontera entre Siria e Israel.
Después de dar vueltas al área durante unos minutos, el helicóptero ruso se dirigió de regreso hacia el este, adentrándose profundamente en Siria. Las fuerzas de las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF, por sus siglas en inglés) y las baterías de defensa aérea cercanas recibieron alertas de la Fuerza Aérea de Israel, que estaba rastreando el helicóptero. Sin embargo, no fue necesario tomar ninguna medida adicional porque el helicóptero permaneció en territorio sirio cerca de los Altos del Golán y no cruzó la frontera.
Recientemente, los rusos expresaron su “insatisfacción” por los frecuentes ataques israelíes a objetivos relacionados con Irán en Siria, principalmente envíos de armas fabricadas por Irán en camino hacia Hezbolá en Líbano.
Esta actividad israelí ha estado ocurriendo durante años con el consentimiento silencioso de Rusia.
Fuentes israelíes afirman que las estrechas relaciones entre Moscú y Teherán, basadas en el suministro de vehículos aéreos no tripulados fabricados por Irán a las fuerzas rusas que luchan en Ucrania, cambiaron la ecuación.
“Teherán está sin duda ejerciendo presión sobre Rusia para que restrinja a Israel de actuar contra objetivos en Siria. Hasta ahora, no hay un cambio en la actitud rusa, pero hay indicios de que algo está sucediendo”, dijo una fuente.
La política rusa hasta ahora de permitir que Israel opere libremente en el espacio aéreo sirio es la razón por la cual Jerusalén se negó a suministrar sistemas avanzados de defensa aérea a Ucrania.
Te puede interesar: Rusia refuerza su presencia militar Siria