El Kremlin ha cambiado su lenguaje al describir el conflicto en Ucrania, pasando de referirse a él como una “operación militar especial” a declarar que Rusia se considera en guerra debido a la intervención de Occidente del lado de Ucrania.
Aunque estos comentarios pueden parecer normales para los oídos ucranianos y occidentales, representan un cambio significativo dentro de Rusia, donde durante mucho tiempo se ha instado a la gente a referirse al conflicto en Ucrania como una “operación militar especial”. Este cambio parece ser parte de un esfuerzo para mentalizar a la población sobre la posibilidad de un conflicto más prolongado y exigente que pueda requerir mayores sacrificios.
Peskov enfatizó que Rusia está en un estado de guerra, especialmente después de la intervención de Occidente en favor de Ucrania. Esto se produce después de que el presidente Vladimir Putin fuera reelegido y de un ataque aéreo ruso contra la infraestructura energética ucraniana, lo que sugiere que Rusia se está preparando para un enfrentamiento más prolongado con Estados Unidos y sus aliados sobre Ucrania.
Un desenlace más que esperado por parte de las autoridades rusas
El cambio en el lenguaje utilizado por las autoridades rusas también podría darles más flexibilidad para anunciar medidas asociadas con una guerra, como una mayor movilización. Aunque oficialmente las acciones de Rusia en Ucrania siguen siendo calificadas como “operaciones militares especiales”, Peskov reconoció que de facto se ha convertido en una guerra debido a la creciente participación occidental en el conflicto.
Los comentarios de Peskov reflejan un cambio de tono en el Kremlin, que anteriormente evitaba el uso de la palabra “guerra” y ahora la emplea con más frecuencia. Esto podría indicar una nueva fase en el conflicto, ya que Rusia admite que los combates se prolongarán más de lo esperado y que sus objetivos no se han cumplido completamente.
Rusia se prepara para un conflicto más amplio con la OTAN antes de lo esperado, según un informe
Con la financiación estadounidense para Ucrania todavía pendiente, los aliados europeos están buscando aumentar su apoyo mientras Rusia organiza nuevos ataques.
Según el Instituto para el Estudio de la Guerra, Rusia está preparándose para un posible conflicto convencional a gran escala con la OTAN. Esto se basa en un análisis de diversos indicadores financieros, económicos y militares rusos. El grupo de expertos sugiere que, aunque no se espera un conflicto de este tipo de manera inmediata, es probable que Rusia esté planeando un cronograma más corto de lo que algunos analistas occidentales habían previsto previamente.
El ejército ruso está llevando a cabo reformas estructurales para respaldar tanto la guerra en Ucrania como para expandir sus capacidades convencionales en preparación para un posible conflicto futuro con la OTAN. El ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, ha mencionado varios esfuerzos en curso para fortalecer las capacidades militares convencionales de Rusia, indicando planes para formar dos ejércitos de armas combinadas, así como 14 divisiones y 16 brigadas para fines de 2024.
Sin embargo, según la evaluación del ISW, Rusia actualmente enfrenta limitaciones en términos de personal, infraestructura militar y capacidad de entrenamiento para dotar adecuadamente de personal a las divisiones y formaciones que necesitará en el corto y mediano plazo.
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Los de la OTAN buscan enfrentarse con los rusos a corto plazo, sin tener en cuenta que esto significaría la IIIGM, con una posible guerra nuclear de consecuencias cataclísmicas. No se quieren convencer de que Ucrania va camino a perder con Rusia y lo quieren evitar, yendo ellos mismos con sus fuerzas regulares, oficiales, a la guerra. Esperemos que esto no signifique el comienzo del fin de la civilización humana actual.
Sí, sería lamentable que acabáramos en tan terrible escenario debido a las ambiciones de un abuelo que no supera sus fantasías de la URSS y no sabe respetar las fronteras y soberanía de otros países.