Semanas atrás, una vez más, el terrorismo azotó al “Viejo Continente”. Esta vez, el brutal atentado terrorista adjudicado por ISIS ocurrido en Moscú, que dejó un saldo de cientos de muertos y heridos, demostró que Europa continúa siendo –como sucedió tiempo atrás- uno de los campos de acción favoritos para las organizaciones yihadistas. ¿Será por la repercusión que tienen dichos ataques? ¿Por qué existe un mayor impacto en los medios? ¿O por el simple hecho de atacar a la sociedad occidental y su estilo de vida y que los yihadistas consideran profana?
Remontándonos un poco al pasado
Años atrás, muchos recordarán los salvajes atentados terroristas que tuvieron lugar entre los años 2014 y 2016, en diversos países del continente europeo. Entre estos, sin duda alguna, los ataques terroristas llevados a cabo por ISIS en Francia, son de los atentados que más quedaron grabados en la retina del mundo. Tal es el caso del trágico ataque ocurrido en la redacción del famoso semanario satírico “Charlie Hebdo” en París. Allí, dos terroristas abrieron fuego contra los trabajadores que se encontraban en el lugar, asesinando a 12 personas bajo grito de “Allahu Akbar”, es decir, “Alá es grande”.
Meses más tarde, en la noche del 13 de noviembre, varios terroristas yihadistas también acabaron con la vida de más de 130 personas en seis lugares distintos de la ciudad parisina. En esta ocasión, los atentados se llevaron a cabo en el “Estadio de Francia”, en el conocido teatro Bataclán –con toma de rehenes incluida- sumado a tres tiroteos ocurridos en diferentes restaurantes de la bella París.
De esta manera, el autodenominado “Estado Islámico” buscaría atacar a los principales estandartes de la cultura occidental, y particularmente, la francesa. Trágicamente, lo mismo sucedería en Manchester y Barcelona, respectivamente.
Terrorismo a la orden del día
Tal como afirmamos al inicio de la columna, en los últimos meses, Europa está comenzando a posicionarse –nuevamente- como el principal escenario elegido por las organizaciones terroristas para perpetrar atentados.
Todo aquello, recordemos, se incrementó tras los ataques terroristas del 7 de octubre pasado llevados a cabo por el grupo terrorista Hamás en territorio israelí, que llevaron a una brutal guerra que la semana pasada cumplió seis meses y que continúa sin un final esperanzador, al menos, por lo pronto. Decimos esto ya que, tras el inicio de dicho conflicto, numerosas organizaciones de ideología yihadista han llamado a todos los musulmanes del mundo a levantarse en armas contra los “enemigos del islam” y hacer realidad la yihad.
Un claro ejemplo de estos distintos llamados a “hacer la yihad”, fue lo difundido por ISIS que –en uno de sus canales de comunicación- propusieron que la toma de rehenes –y la posterior ejecución- de ciudadanos judíos en las escuelas de países nórdicos como Suecia, Dinamarca y Noruega, podría ejercer presión para que se llegue a un fin de la guerra en Gaza.
Otro caso de gran relevancia fue lo sucedido días atrás, cuando el autodenominado “Estado Islámico” utilizando su fundación llamada Al Azaim, publicó un cartel en donde, bajo el lema de “Matarlos a todos”, realizó una amenaza a cuatro estadios de fútbol ubicados en Londres, París y Madrid. Todos aquellos, escenarios de los cuartos de final de la famosa competencia europea denominada “Champions League”.
Algo similar sucedió hace unas semanas, cuando ISIS-K difundió una imagen aterradora en donde se puso ver a los espectadores de un partido de futbol alemán llevado a cabo en el Allianz Arena, bajo la mira de un francotirador. Esto en el marco del partido entre el Bayern Múnich y el Borussia Dortmund que albergó a muchísima gente. En cuanto a esto último, en el diccionario yihadista, los lugares con una masiva concentración de personas son denominados “objetivos blandos” y tienden a ser los elegidos como escenarios debido a su la gran repercusión mediática.
Todos los casos mencionados anteriormente, toca un poco la cuestión del rol que cumple la propaganda en el terrorismo yihadista, de la cual nos, debido a su gran relevancia, nos ocuparemos en otro momento.
La situación en diversos países
A partir de octubre, en el transcurso de estos meses, autoridades de diversos países europeos llevaron a cabo varios arrestos de sujetos vinculados a organizaciones terroristas, entre ellas, ISIS-K, autor del brutal atentado ocurrido en Rusia semanas atrás. Aquí cabe aclarar que, según los expertos, ISIS-K – al día de hoy- sería la única rama del autodenominado “Estado Islámico” con las capacidades de realizar un atentado terrorista en Occidente.
A raíz de lo mencionado anteriormente, el gobierno francés activó el nivel de alerta máximo con relación a un potencial ataque terrorista, teniendo en cuenta que Francia será anfitriona de los Juegos Olímpicos a desarrollarse el julio próximo.
Así como sucede en Francia, como era de esperarse, las acciones tomadas frente al terrorismo son distintas en cada estado. Por ejemplo, en el caso de España, se encuentra en el nivel 4 sobre 5 de alerta terrorista, la cual fue reforzada durante Semana Santa, celebrada enormemente en aquel país. Un hecho similar sucedió en Italia y más precisamente en la Ciudad del Vaticano, en donde -tras lo sucedido en Moscú- también elevaron el nivel de alerta, tomando así, las medidas necesarias para garantizar todas las actividades en torno a la pasada Semana Santa.
Un panorama complejo
Como vimos a lo largo de la columna, el terrorismo y los grupos que lo llevan a cabo están buscando nuevamente ampliar su campo de accionar, volviendo a trasladar sus atentados a suelo europeo. Sin embargo, es necesario aclarar que no se trata solamente del autodenominado “Estado Islámico” –ISIS, por sus siglas en inglés- y sus distintas ramas alrededor del mundo, quienes están a cargo de la planificación y puesta en marcha de los atentados terroristas en Europa, como lo fue en 2015. Actualmente, la amenaza terrorista proviene de distintas fuentes como lo pueden ser Hamás, Hezbolá y la Yihad Islámica. Todas ellas, organizaciones terroristas que, tras los ataques del 7 de octubre, cobraron más coraje, mientras que su ideología macabra sigue expandiéndose alrededor del mundo.
Te puede interesar: Rusia inicia causa penal sobre “financiación del terrorismo” por parte de EE.UU. y la OTAN