Este miércoles en Berlín, el Reino Unido y Alemania firmaron una declaración conjunta de defensa con el objetivo de fortalecer la cooperación, fortalecer sus industrias de defensa, y reforzar la seguridad europea frente a la situación en Ucrania.

Keir Starmer y Olaf Scholz

Las preocupaciones del Reino Unido y Alemania frente a Trump

Las preocupaciones de que Washington pudiera reducir drásticamente el apoyo a Ucrania el próximo año han aumentado desde que el candidato republicano Trump eligió a JD Vance como su compañero de fórmula. Vance enfatiza repetidamente su oposición a que Estados Unidos firme lo que ha llamado “cheques en blanco” para ayudar a Kiev en su lucha contra la invasión rusa.

Gran Bretaña es un firme defensor de Ucrania y eso continuará bajo su nuevo gobierno laborista de centroizquierda, dirigido por el Primer Ministro Keir Starmer, que ganó con una victoria aplastante este mes.

El nuevo gobierno laborista del país está más entusiasmado en forjar una cooperación de defensa más profunda con los aliados europeos que su predecesor conservador, y actuó rápidamente para firmar un acuerdo de cooperación con Alemania el miércoles.

El ministro de Defensa británico, John Healey, concluyó el pacto con su homólogo alemán, Boris Pistorius, en el complejo ministerial Bendlerblock en Berlín.

“Luchamos juntos, entrenamos juntos, bebemos cerveza juntos”, dijo Healey durante una conferencia de prensa junto a Pistorius en Berlín.

El compromiso con la seguridad europea

El acuerdo compromete a ambas partes a aumentar la coordinación industrial y las operaciones conjuntas, aunque prevé mucho más por venir. “Estas visitas envían un mensaje claro de que la seguridad europea será la primera prioridad exterior y de defensa de este gobierno”, dijo Healey en un comunicado.

Aunque el acuerdo no representará un cambio radical inmediato en las relaciones entre los dos ejércitos y ministerios de defensa, sí compromete a ambas partes a comenzar a estandarizar sus sistemas de armas y municiones.

La guerra en Ucrania y las diferencias en el armamento donado al país han subrayado hasta qué punto está fragmentada la industria de defensa de Europa.

Eso ha llevado a los grandes actores del continente a comprometerse a trabajar más estrechamente juntos, y el nuevo gobierno británico ha indicado que está dispuesto a participar directamente en esos programas.

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Redacción
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