En un intercambio sin precedentes entre Estados Unidos y Rusia, el presidente ruso Vladimir Putin recibió en el aeropuerto de Vnúko-2 de Moscú a ocho prisioneros, destacándose la pareja de espías “argentinos” que, durante años, vivieron bajo identidades falsas en Eslovenia. 

En este histórico canje de prisioneros, el Kremlin acordó liberar a un ex marine estadounidense, activistas políticos y un periodista de The Wall Street Journal que trabajaba como corresponsal en Moscú pero fue detenido por las autoridades rusas en marzo del 2023, acusado de espionaje. A cambio, Rusia obtuvo la liberación de Vadim Krasikov, un sicario condenado a cadena perpetua en Alemania por el asesinato en Berlín de un ex líder separatista checheno, además de varios agentes de inteligencia y piratas informáticos rusos retenidos en Estados Unidos y Europa. Dentro de este último grupo se encontraba la pareja de espías rusos con pasaportes argentinos.

El presidente de Rusia, Vladimir Putin, da la bienvenida a los ciudadanos rusos liberados en el intercambio de prisioneros con Occidente. Fuente: KIRILL ZYKOV – POOL

¿Quiénes eran los espías argentinos que Putin recibió con honores?

Anna Valerievna Dultseva y Artem Viktorovic Dultseva vivieron durante años bajo los nombres de María Rosa Mayer Muños y Ludwig Gisch: dos espías rusos con pasaporte argentino. En su coartada, eran expatriados argentinos que en el año 2012 se instalaron en la Ciudad de Buenos Aires, se casaron nuevamente y vivieron durante 5 años en el barrio de Belgrano. Sus hijos nacieron en el Hospital Italiano de Buenos Aires en 2013 y 2015.

Sus pasaportes eran verídicos, ambos obtuvieron la ciudadanía apelando a diferentes historias. Gisch, por ejemplo, presentó una documentación que afirmaba ser un ciudadano austríaco nacido en Namibia con madre argentina, mientras que Mayer Muños se presentó como mexicana con un certificado de nacimiento falso que indicaba un lugar de nacimiento en Grecia. Con estas historias, lograron crear una fachada de familia normal, manteniendo un perfil bajo, y finalmente en 2017 se trasladaron a Eslovenia en familia. 

Los pasaportes argentinos de los espías rusos.

Cada uno dirigía una empresa y llevaba una vida apacible en un barrio tranquilo en Liubliana, la capital eslovena, hasta que la policía secreta irrumpió en su casa a principios de diciembre de 2022. Allí los identificaron como agentes encubiertos rusos y los detuvieron. 

Una de las partes más sorprendentes de esta historia es el papel de los hijos de la pareja, quienes, hasta el momento del canje, no sabían que sus padres eran espías. Durante el vuelo a Moscú, los niños se enteraron de la verdad sobre su familia, aunque ambos sean argentinos. 

Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin, declaró que los niños “ni siquiera sabían quién es Putin”. En conferencia de prensa añadió que “los hijos de los agentes que llegaron ayer descubrieron que eran rusos sólo cuando el avión despegó de Ankara. Antes de esto, no sabían que eran rusos y estaban relacionados con nuestro país. Y probablemente vieron que, cuando los niños bajaron la escalerilla del avión, no hablan ruso y Putin les saludó en español”.

Un intercambio de prisioneros de alto perfil: reconocimiento y medallas

El acuerdo implicó la liberación de varios prisioneros, incluyendo un ex marine estadounidense, activistas políticos y un periodista del Wall Street Journal. A cambio, Rusia obtuvo la liberación de un convicto y varios agentes de inteligencia y piratas informáticos rusos retenidos en Estados Unidos y Europa.

En la recepción en Moscú, Putin felicitó a los liberados y destacó: “Primero de todo quiero felicitar a todos por su regreso a la patria. Ahora quiero dirigirme a los que tienen relación con el servicio militar. Quiero darles las gracias por su lealtad al juramento, su deber con la patria que ni un minuto se olvidó de ustedes”. 

El presidente de Rusia, Vladimir Putin, recibe a Krasikov, liberado de una cárcel de Alemania. Fuente: MIKHAIL VOSKRESENSKIY – POOL

En este acto, el presidente ruso prometió que todos recibirán medallas estatales y que próximamente hablarán sobre su futuro.

Así, Estados Unidos y Rusia completaron uno de los mayores canjes de prisioneros en la era postsoviética, donde también Moscú liberó a los estadounidenses Evan Gershkovich y Paul Whelan, junto con disidentes como Vladimir Kara-Murza, en un acuerdo que involucró a dos docenas de personas.

Te puede interesar: Atrapan a pareja de espías rusos que se hacían pasar por argentino

Redacción
Equipo de redacción de Escenario Mundial. Contacto: info@escenariointernacional.com

Dejá tu comentario