Desde hace unos años, países europeos dentro de la OTAN están comenzando a tener problemas para enlistar jóvenes en sus filas, teniendo como amenaza y antesala la guerra de Ucrania y Rusia casi tocando sus puertas. El caso de República Checa es un ejemplo de ello, ya que el país ha tratado sin resultados positivos mantener el nivel de tropas, dejando a las propias sin personal y sin la capacidad de llegar a un nivel de combate requerido.
“Queremos disuadir a cualquier adversario potencial en el futuro”, dijo Rehka. “Si no hacemos nada respecto a la falta de recursos humanos en el ejército…, puede significar que no seremos capaces de preservar nuestra paz y disuadir a cualquier enemigo potencial”, explicó el general Karel Rehka, jefe de las fuerzas armadas checas.
Otros países europeos que luchan con la misma problemática van a Polonia, Hungría, Rumania y Eslovaquia, los cuales comparten frontera con Ucrania. En ese sentido, un reporte de Reuters indicó en el mes de julio que los miembros de la OTAN necesitarán al menos entre 35 y 50 brigadas para cumplir con los planes o tienen la capacidad necesaria para repeler un ataque de Rusia en el territorio.
Cabe resaltar que meses tras, un comandante de las Fuerzas de Defensa de Estonia, Martin Harem, advirtió que se está subestimando la capacidad de producción de munición y armamento de Rusia. Por otro lado, Noruega y Suecia, los últimos en entrar a la alianza, también sugirieron a sus gobiernos que deben prepararse para un posible futuro conflicto.
En pos de lo que podría pasar en un futuro, muchas naciones han adoptado algunas medidas como campañas de marketing digital, el aumento de bonus por enlistarse y la baja de requerimientos médicos para entrar. En ese sentido, otros mencionan que debido a las tasas de desempleo bajas en toda Europa del Este, un desafío importante que se ha presentado es convencer a los jóvenes de que se alisten por menos dinero del que pueden ganar en el sector privado.
El caso de Polonia es otro ejemplo. Este busca aumentar el tamaño de su ejército a 300.000 soldados y ha lanzado una campaña de reclutamiento que ofrece formación básica a ciudadanos de 18 a 35 años. Sin embargo, enfrenta dificultades debido a la alta tasa de salida de soldados profesionales, con 9,000 bajas en 2023. En respuesta, el gobierno polaco está mejorando los incentivos financieros para retener a los soldados.
Hungría también está promoviendo el reclutamiento mediante una campaña mediática que incluye anuncios y una serie de televisión temática. Mientras tanto, Rumanía está lidiando con una falta significativa de personal, con un 43% de las posiciones de oficiales y un 23% de las de soldados sin cubrir. Aunque Rumanía tiene sistemas de misiles Patriot y cazas F-16, carece de suficientes pilotos entrenados. Las autoridades rumanas y otros países están considerando cambios legislativos para mejorar la retención de soldados.
Por último, más allá de Europa, Reino Unido también está tratando con la misma problemática. En tal sentido, una de decisiones que se tomó desde el gobierno nacional del primer ministro británico Rishi Sunak fue la de reintroducir el servicio militar obligatorio, un plan que derivaría de “las crecientes amenazas internacionales que plantean países como Rusia y China”.
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