El presidente de Francia, Emmanuel Macron, rechazó el lunes las pretensiones de la izquierda nacional para nombrar un primer ministro. Esto se debe a que su partido perdió las elecciones en julio, pero el actual funcionario rechazó que la alianza de izquierda, que obtuvo mayor número de escaños en tales comicios, no esté a cargo por miedo a que el país “se bloquee o debilite”.
Según las palabras del actual líder, un gobierno de izquierda “sería inmediatamente censurado por todos los demás grupos representados en la Asamblea Nacional” y “la estabilidad institucional de su país exige no elegir esta opción”. Además, el partido de Macron ha prometido votar en contra de un gobierno de tal estilo, junto con los conservadores y la extrema derecha.
Cabe recordar que las elecciones del pasado mes de julio dejaron la Asamblea Nacional de 577 escaños dividida entre la alianza de izquierdas Nuevo Frente Popular (NFP), con más de 190 escaños, seguida de la alianza centrista de Macron, con unos 160, y la Agrupación Nacional de la ultraderechista Marine Le Pen, con 140. En este contexto, Macron invitó a los líderes de los partidos a mantener conversaciones para encontrar un “candidato de consenso”.
Entre selección de primer ministro y denuncias por antidemocracia
Por su parte, el NFP -principalmente el partido de extrema izquierda France Unbowed (LFI)- exigió su derecho a formar gobierno, argumentando que habiendo obtenido el mayor número de escaños y, por ende, debía elegir al nuevo Primer Ministro. En conjunto, Lucie Castets fue postulada como candidata.
Y aunque el jefe del Partido Socialista, Olivier Faure, afirmó no querer “participar en un espectáculo en el que los dados están cargados” contra la izquierda, el LFI mostró enojo y preocupación. Además, Macron en su momento calificó a la LFI de movimiento extremista.
La decisión de Macron se trata de un “golpe antidemocrático inaceptable”, según el coordinador del partido Manuel Bompard, mientras que el líder Jean-Luc Melenchon, publicó que Macron había creado ”una situación de excepcional gravedad” y pidió una “respuesta firme y enérgica” por parte del público y los políticos.
Actualmente, Macron ha dejado a Gabriel Attal como jefe de Gobierno interino mientras busca una figura con suficiente apoyo amplio, pero la elección del candidato está demorando más de lo necesario, principalmente porque Francia se encuentra a poco más de un mes de la fecha límite para presentar un proyecto de presupuesto para 2025.
Te puede interesar: Francia decide reconocer la plena soberanía de Marruecos sobre el Sahara Occidental, generando tensiones con sus ex colonias africanas