En medio de las recientes negociaciones entre Argentina y el Reino Unido, la vicepresidente de la Nación, Victoria Villarruel, expresó su disconformidad respecto al acuerdo bilateral que involucra temas clave sobre las Islas Malvinas. A través de su cuenta en la red social X, Villarruel señaló que el pacto anunciado contradice los intereses de la Nación y representa un retroceso en la histórica reclamación de soberanía argentina sobre las islas.
Villarruel, reconocida por su fuerte posición sobre la cuestión Malvinas, manifestó: “La propuesta de acuerdo anunciada con el Reino Unido es contraria a los intereses de nuestra Nación. Esta propone entregar apoyo logístico continental a la ocupación y permitir que sigan depredando nuestros mares”. En su publicación, la vicepresidente cuestionó las ventajas que obtendría el Reino Unido frente a lo que considera “migajas” para Argentina, advirtiendo que este tipo de acuerdos debilitan la capacidad de negociación del país.
Tensiones en la cúpula gubernamental
Las críticas de Villarruel contrastan con la postura de la Cancillería argentina, encabezada por Diana Mondino, quien ha promovido la cooperación con el Reino Unido en áreas como la conectividad y la conservación de pesquerías en las aguas circundantes a las Malvinas. En el marco de un encuentro en Nueva York con el Secretario de Relaciones Exteriores británico, David Lammy, Mondino acordó medidas concretas para la reanudación de los vuelos semanales entre San Pablo y las Islas Malvinas, con escala mensual en Córdoba.
Asimismo, ambos representantes diplomáticos discutieron la tercera fase del Plan Proyecto Humanitario, una iniciativa conjunta con la Cruz Roja Internacional que busca identificar los cuerpos de los soldados argentinos caídos durante el conflicto bélico de 1982. Estos avances, según Mondino, fortalecerían la cooperación bilateral y mejorarían la relación entre las islas y el continente, siempre bajo la fórmula de salvaguardia de soberanía, tal como se estableció en la Declaración Conjunta del 19 de octubre de 1989.
Reacciones y perspectivas
La vicepresidente, sin embargo, no comparte esta visión y cuestiona la lógica detrás de la cooperación con una potencia que, en sus palabras, “usurpa nuestro territorio”. Para Villarruel, mientras Estados Unidos ofrece apoyo para proteger el mar argentino de la pesca ilegal, el acuerdo con el Reino Unido parece ir en la dirección opuesta, debilitando la posición argentina.
Si bien Villarruel aclaró que sus críticas no son un ataque directo al gobierno, destacó que la cuestión Malvinas es un tema que toca “cada fibra de su identidad” y que no puede mantenerse en silencio ante lo que considera una amenaza a los intereses permanentes de la Nación. Sus declaraciones ponen de relieve la división dentro del gobierno sobre cómo manejar la relación con el Reino Unido y la disputa por la soberanía de las Malvinas.
El acuerdo también incluye la organización de un viaje para que los familiares de los soldados caídos puedan visitar las tumbas de sus seres queridos en las islas antes de que finalice el año, un gesto de alto valor simbólico que busca reforzar el vínculo emotivo entre los argentinos y las Malvinas.
A pesar de las críticas, desde la Cancillería sostienen que estos avances permiten consolidar una agenda “más ambiciosa” de cooperación en diversas áreas, promoviendo el desarrollo económico y humano, y estrechando los lazos entre el continente y las islas.
Te puede interesar: Diana Mondino se reúne con el Secretario de Relaciones Exteriores del Reino Unido y establecen la reanudación de los vuelos hacia Malvinas
Con los ingleses nada hasta que se trate la soberanía de Malvinas. Nada.
Tal cual lo comenté en otro foro de discusión, es lamentable como politizamos el tema Malvinas, luego nos rasgamos las vestiduras diciendo que es “una cuestión de estado”… así nos va.