La industria de la defensa rusa está haciendo a serios desafíos que podrían paralizar las exportaciones de material bélico. Las tasas de interés impuesta por el Banco Central de Rusia, la alta demanda por la guerra en Ucrania y la falta de recursos humanos son algunos de los factores que están ralentizando las entregas a clientes extranjeros.

El sistema antiaéreo S-400. India expresó oportunamente su preocupación por las demoras para la entregada de material adquirido hace años. Foto: MinDef Rusia

Citado por el Financial Times, Sergei Chemezov, CEO del fabricante estatal de armamento Rostec expresó recientemente ante senadores rusos que “…Lamentablemente no podemos entregar todo [para la exportación] a tiempo, porque ante todo es importante abastecer a nuestro ejército…”. Esto implica que uno de los principales actores de la industria de la defensa rusa podría suspender las exportaciones de sus productos de alta tecnología, incluidos aviones, sistemas de defensa aérea y buques, ante la creciente demanda impuesta por el conflicto en Ucrania.

La guerra en Ucrania está teniendo un elevado costo en recursos materiales para las Fuerzas Armadas rusas, no solo por las pérdidas de miles de vehículos, aeronaves y material de todo tipo, sino por el desgaste que implica sostener por más de tres años el tipo de operaciones que se están desarrollando en los campos de batalla ucranianos y, más reciente en el tiempo, rusos, luego de que se abriera el frente en Kursk.

Es por esta razón que, tanto Rostec como otros proveedores de Moscú, están sufriendo la presión por la incesante demanda de las Fuerzas Armadas rusas, las cuales continúan con un alto requerimiento de producción debido a la naturaleza de los combates, y a las ya mencionadas pérdidas. Es por esta razón que la industria de la defensa rusa está casi obligada a enviar un importante porcentaje de su producción a las FFAA en lugar de venderlo o hacer entregas a clientes extranjeros.

La exportación de helicópteros y aviones de combate rusos también ha sufrido demoras por la alta demanda de las FFAA de Moscú. Foto: MinDef Rusia

Chemezov también se expresó respecto a las altas tasas de interés del Banco Central de Rusia, al mencionar que “…Todos los beneficios son devorados por los intereses que tenemos que pagar…Hoy se trata de detener todas las exportaciones de productos de alta tecnología…El uso de fondos prestados simplemente no es rentable para las empresas…Si seguimos trabajando así, la mayoría de las empresas quebrarán…”. Las palabras del directivo de Rostec se deben a la campaña de ajuste monetario implementada por Moscú luego de que la rublo se debilitara, así como por el creciente gasto ocasionado por la guerra, lo que derivó en un incremento inflacionario.

Otro de los desafíos señalados por Chemezov es el faltante de personal para cumplir con el fuerte aumento de los pedidos estatales, a pesar de que su fuerza laboral se expandió considerablemente en el transcurso del 2023. Fuentes oficiales rusas han indicado que más del 70 por ciento de las empresas sufren escasez de mano de obra.

Otro punto critico son las importaciones chinas, las cuales han ido ocupando paulatinamente el nicho para productos civiles en el mercado ruso, como es el caso de los camiones. Con Kamaz y Avtovaz atendiendo la demanda militar, compañías chinas han logrado ampliar su presencia, lo que provocó un llamado de Chemezov a la protección por parte del gobierno en agosto. “…Mientras las empresas industriales rusas participan en la ejecución de órdenes gubernamentales, China las está reemplazando muy fácilmente [en otras áreas]…”.

Imagen de portada ilustrativa. Créditos: UAC

Te puede interesar: ¿Qué planes tienen Harris y Trump ante la invasión rusa a Ucrania?

Redacción
Equipo de redacción de Escenario Mundial. Contacto: info@escenariointernacional.com

Dejá tu comentario