La cooperación económica y militar entre Rusia, China, Corea del Norte e Irán representa una amenaza significativa para Europa, el Indo-Pacífico y América del Norte, declaró el Secretario General de la OTAN, Mark Rutte, el 12 de noviembre. Sus palabras, interpretadas como un mensaje para la próxima administración estadounidense de Donald Trump, destacaron la importancia de la unidad transatlántica y el apoyo continuo a Ucrania frente a la invasión rusa.

Antes de iniciar conversaciones con el presidente francés Emmanuel Macron, Rutte expresó sus preocupaciones sobre el apoyo militar que Rusia recibe de Corea del Norte e Irán. Además, resaltó el respaldo económico de China a la economía rusa, el cual contribuye a su industria de defensa y amplifica su narrativa en el escenario global.

“Rusia, trabajando en conjunto con Corea del Norte, Irán y China, no solo amenaza a Europa, sino también la paz y la seguridad en el Indo-Pacífico y América del Norte”, afirmó Rutte.

Incertidumbre sobre el apoyo occidental hacia Ucrania

La reciente victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales estadounidenses ha generado incertidumbre en Kiev y otras capitales europeas, ya que el mandatario ha cuestionado la magnitud del apoyo occidental a Ucrania y ha prometido terminar el conflicto de manera rápida, aunque sin especificar cómo. Ante el avance ruso y la reciente presencia de aproximadamente 11,000 soldados norcoreanos en la región de Kursk, en Rusia, el futuro apoyo de Estados Unidos es visto como crucial por los aliados de Ucrania.

El presidente Emmanuel Macron reafirmó su disposición a continuar proporcionando ayuda a Ucrania durante el tiempo que sea necesario. Insistió en que cualquier decisión futura sobre Ucrania debe incluir a los ucranianos y cualquier acuerdo sobre Europa debe contar con la participación europea, enfatizando la relevancia de la autonomía de las partes directamente afectadas en el conflicto.

Ucrania continúa esforzándose por fortalecer su posición para cualquier futura negociación, a la vez que busca asegurar más armamento y resistir en el campo de batalla. Según un alto funcionario ucraniano, los próximos cuatro o cinco meses serán críticos para el desenlace del conflicto. Rutte subrayó la necesidad de mantener el curso en la guerra y redoblar el respaldo a Ucrania, argumentando que es esencial aumentar el costo de las acciones de Putin y sus aliados autoritarios.

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Fuente: The Strait Times

Redacción
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