Brasil busca aumentar su competitividad en el comercio internacional mediante un acercamiento a China, que le permita concretar nuevas inversiones en su sector portuario. En el marco de recientes reuniones, el secretario de Puertos de Brasil, Alex Ávila, junto con otros funcionarios, sostuvo conversaciones con altos ejecutivos de China Merchants Port (CMPort) para analizar las oportunidades de expansión en terminales portuarias de relevancia estratégica, incluyendo la Terminal de Contenedores de Paranaguá y el proyecto de Tecon Santos 10, cuya concesión se prevé subastar en 2025.
“Los ejecutivos chinos de CMPort manifestaron un fuerte interés en expandir sus operaciones en Brasil”, indicó el Ministerio de Puertos y Aeropuertos, citado por BN AMERICAS. El gigante asiático es el principal socio comercial de Brasil desde hace 14 años, con un comercio bilateral que superó los 170 mil millones de dólares en 2022. Esta sólida relación económica entre ambos países, especialmente en commodities agrícolas, minerales y productos cárnicos, facilitó que el desarrollo de la infraestructura portuaria sea prioritario para el gobierno brasileño, que busca mantener la eficiencia en las exportaciones hacia el mercado asiático.
Según Ávila, citado desde BN AMERICAS, “los puertos brasileños desempeñan un papel esencial y estratégico en el comercio exterior,” destacando la importancia de esta cooperación para fortalecer el intercambio. A esto se suma la reciente firma de un compromiso de cooperación de largo plazo entre el canciller brasileño, Mauro Vieira, y el ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, en el que resaltaron la intención de ambas naciones de explorar sinergias en infraestructura y tecnología bajo la Iniciativa de la Franja y la Ruta, de la que Brasil es un participante clave.
Brasil busca impulsarse con su relación bilateral con China
Para la principal economía sudamericana, la inversión china no solo significa mejorar la infraestructura portuaria, sino también impulsar el empleo y la reindustrialización en regiones claves como Paraná y São Paulo. La cooperación en proyectos como el canal de Paranaguá y Tecon Santos 10 representa una oportunidad crucial para mejorar la infraestructura logística del país, atrayendo inversiones extranjeras que, a su vez, generarán un impacto positivo en la economía nacional.
Con un mercado vasto y en crecimiento en China, la colaboración bilateral también se perfila como un elemento central para consolidar a Brasil como uno de los principales proveedores de recursos naturales de Asia. Este vínculo económico se refuerza con el interés de CMPort en Brasil, que no solo subraya el atractivo del país sudamericano para la inversión extranjera, sino que también refleja el potencial estratégico de estas inversiones para transformar la infraestructura portuaria brasileña.
Además, estas inversiones posicionan a Brasil en un papel clave en el comercio global, no solo como un proveedor esencial para Asia, sino como un actor en ascenso en la economía internacional. Al fortalecerse como principal proveedor de recursos para Asia, Brasil avanza en su ambición de consolidarse como una de las potencias económicas emergentes del mundo. Este desarrollo no solo impulsa su capacidad exportadora, sino que también amplifica su influencia política y económica, permitiéndole proyectarse como el representante de América Latina en la arena global.
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