Aunque el consenso global en la reciente cumbre del G20 resulto ser limitado, el evento sirvió para profundizar los lazos bilaterales de la India con las naciones latinoamericanas, como el caso de Argentina, Brasil y Chile. Durante este último tiempo, América Latina se convirtió en el nuevo foco de interés global, consolidándose como una región clave en la agenda comercial de los principales países desarrollados, y particularmente en la del Gobierno de Modi.

En este contexto, bajo la dirección de Luiz Inácio Lula da Silva, en la reciente reunión del grupo de los 20, Brasil delineo tres prioridades principales: la lucha contra la pobreza y el hambre, el desarrollo sostenible y la reforma de las instituciones de gobernanza global. Estas prioridades encuentran eco en los objetivos promovidos por Narendra Modi durante la anterior cumbre en Nueva Delhi, lo que resalta una convergencia estratégica entre India y la región.

Pero eso no lo único, durante el encuentro, India buscó plasmar, mediante reuniones bilaterales, un objetivo claro: fortalecer su presencia en América Latina. Las reuniones de Modi con el presidente argentino, Javier Milei, y su homólogo chileno, Gabriel Boric, son un claro ejemplo y subrayan este interés renovado en la región. En el caso de Chile, la ampliación del Acuerdo de Comercio Preferencial hacia un Acuerdo de Asociación Económica Integral también podría marcar un avance significativo en los vínculos comerciales.

Celebrando los cinco años de la Asociación Estratégica entre Argentina e India, la reunión de ambos líderes reafirmó la voluntad de estrechar la cooperación en sectores clave como energía, defensa, comercio y cultura. A través de su cuenta oficial de X, el funcionario indio afirmó: “Tuvimos una reunión destacada con el presidente argentino, Javier Milei. India aprecia la estrecha amistad que mantiene con Argentina. Nuestra Asociación Estratégica cumple 5 años, lo que le agrega un gran dinamismo a las relaciones bilaterales. Hablamos sobre la mejora de los vínculos en materia de energía, producción de defensa, comercio y cultura”.

Según se pudo saber, la conversación incluyó un análisis de las oportunidades de colaboración en el ámbito energético, un sector donde ya se lograron avances bilaterales importantes. En particular, Argentina y la India firmaron previamente acuerdos para la cooperación en petróleo y energía, permitiendo a India diversificar sus fuentes de suministro energético y consolidar su estrategia de seguridad energética.

En el terreno comercial, ambos líderes expresaron su interés por expandir el intercambio de bienes, aprovechando la complementariedad de sus economías. India se convirtió en un socio comercial clave para Argentina y la región, particularmente en la importación de productos agrícolas como aceite de soja. Al tiempo que el mercado indio representa una gran oportunidad para los productos industriales y tecnológicos argentinos.

Lo cierto es que esta creciente interacción entre India y América Latina refleja una tendencia más amplia: el reconocimiento del potencial económico y estratégico de una región tradicionalmente subrepresentada en el escenario global. A medida que Brasil tomó las riendas del G20, es probable que esta atención hacia América Latina se intensifique, marcando una nueva etapa en las relaciones entre las economías emergentes del sur global.

Redacción
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