Dos petroleros rusos, el Volgoneft 212 y el Volgoneft 239, sufrieron graves daños el 15 de diciembre cerca del estrecho de Kerch, partiendo sus cascos por la mitad y provocando un derrame masivo de fuel oil. Según medios rusos, el Volgoneft 212 transportaba aproximadamente 4.300 toneladas de fuel oil, de las cuales unas 4.000 ya se derramaron en el mar, formando una extensa mancha negra en la superficie.
En este sentido, el accidente, que se produjo bajo condiciones meteorológicas adversas, movilizó a equipos de rescate en la región. Un remolcador denominado Mercury y un helicóptero Mi-8 del Ministerio de Emergencias de Rusia auxiliaron a los tripulantes afectados y mitigaron las consecuencias del derrame.
“El impacto de las olas habría contribuido al colapso de las estructuras de ambos buques”, reportaron fuentes locales. La tripulación de los petroleros rusos, compuesta por 13 marineros en el caso del Volgoneft 212, está siendo rescatada por equipos especializados. El segundo petrolero, Volgoneft 239, también se partió y comenzó a hundirse poco después, según Interfax.
Ucrania denunció la “flota paralela” de Rusia para eludir sanciones petroleras
Este incidente ocurre en una zona estratégica. El estrecho de Kerch conecta el mar Negro con el mar de Azov, una vía esencial para el transporte de hidrocarburos desde Rusia. Además, las aguas de esta región ya enfrentan tensiones geopolíticas relacionadas con el conflicto entre Rusia y Ucrania.
Recientemente, Kiev ha identificado 238 petroleros que, según la Dirección de Inteligencia Militar del Ministerio de Defensa de Ucrania, forman parte de una extensa flota paralela utilizada por Rusia para transportar petróleo y combustibles a nivel global, desafiando las sanciones impuestas por Occidente.
De acuerdo con el informe publicado por Ucrania, esta “armada fantasma” representa una inversión de aproximadamente 10 mil millones de dólares y está compuesta por más de mil buques, en su mayoría antiguos y mal mantenidos. La estructura de propiedad y gestión de estos barcos se describe como “confusa”, ya que operan bajo banderas de conveniencia y en jurisdicciones consideradas “amigas” de Rusia.
Te puede interesar: El ministro de Defensa de Alemania denuncia la creciente presencia de Rusia en el Mar Báltico